domingo, 26 de marzo de 2017

Enciendo


Oh Todo:

Dame un nombre
para traerte un instante sagrado
inspírame a nacer 
que escribo sudarios
y deseo sembrar entre los versos
hijos del sol junto al lago

Ahora, escucha... eres un encanto
me dejo llevar por la sombra que camino
y cuando me doy la vuelta
río iluminado

cada deseo a la ilusión me aproxima
y cuando ella me abraza
la razón, desnuda entre sus manos
se va evaporando

buceo hacia la cima
de una montaña de papeles
como la sombra de un alma
en vuelo allá arriba

Ese algo me advierte:
te incendias o te enciendes

A ti me ofrezco, tal como soy
estoy en flor
te pertenezco

He nacido para cantarle al amor
y para sentir el peso
propio y ajeno

Permíteme cultivarte
con instrumentos cotidianos
y sentir el sutil cosquilleo 
de los chakras bajo mis manos

con cada verso soy
la pluma, el viento y el pájaro

Déjame diluirme, en cada risa en cada llanto
sentir tu perfección 
pues en mi descarada ignorancia 
sólo sé, que te amo

No hay comentarios:

Publicar un comentario