He sembrado rosas, lavandas y amapolas
admirando la belleza de paisajes y personas
he sembrado espinos, cardos y cactos
juzgando a mis hermanos
sin ponerme sus zapatos
He plantado robles, olmos y olivos
visitando y honrando
la amistad de mis amigos
y ahora que veo una pradera verde
con árboles frondosos
y montañas en el fondo
agradezco a la familia todo
el amor que me han ido dando
por más egoísta que fuese
al final me han perdonado
y ahora que no veo
ni los espinos ni los cardos
solo flores, árboles y pasto
doy gracias al Universo
por plantar en mi pecho un simple
corazón, de hortelano