Tal vez los ojos de cristal de los móviles
comiencen a girar
y puedas mandarle un wassup a tu nevera
pero las margaritas seguirán tomando el sol
y dejándose hacer por las abejas
Es posible que la inteligencia artificial
reproduzca tus canciones favoritas
mientras se te secan los calcetines
sin que te des cuenta...
Pero los pantanos se seguirán vaciando
mientras reproduzcamos esta plaga de cables y plástico
y no es que la luna vaya a dejar de masajear al mar
o el viento pare de acariciar las montañas
es sencillamente que encendemos la tele en lugar de la hoguera
el calentador, en vez del arroyo
y es que la música no sale de tu guitarra
sino de cualquier otro cacharro
Escribimos informes en uniformes para mentalidades deformes
tomamos píldoras para no escuchar el desorden instalado en la cabeza
matamos animales sin mancharnos las manos
y no nos damos cuenta, de que nos estamos matando
o nos la damos, pero nos da lo mismo, porque vamos blindados
A ver cómo te lo explico
no me cuentes cuentas
me voy a vivir...
a vivir al campo
La èpica de hoy es el nosotros,
ResponderEliminarno basta con ser yo
para ser buenos
Hay mucho que cambiar
¡Empujemos juntos, empujemos!
Es cierto, un yo cada vez más amplio... Desde la singularidad individual, de cuya realización es cada uno responsable, hasta un yo comunitario, un yo con voz de coral, de acento mestizo, puro, ácido y alcalino... yo creo que el camino a la Utopía es nuestro destino inevitable, aunque, graciasgaala libertad, siempre puede posponerse.
Eliminar