jueves, 5 de junio de 2025

Lo que no muere

 Acudo a este viejo oficio, de acunarme la conciencia

 a cielo abierto.

El sello de la profecía está marcado,

a fuego 

Sobre la piel tostada 

Pero la piel en blanco 

Pareciera no tener escrito nada 


Un violín en la niebla 

Abre camino 

Y de pronto veo 

Un guerrero pacífico 

Preparándose para la batalla 

de las figuras casi 

imposibles 


Acudo al río que deshilacha el glaciar 

Voy a identificarme con lo que no muere

Voy a aprender a morir 

para vivir en la vida 



Yo soy el agua, el junco y la grulla

el latido de la cueva a oscuras 

El cuarzo que bebe 

El agua que drena la tierra oscura 


Y con el ciervo astado 

y la liebre ligera

el pájaro negro que anuncia la tormenta 


Buscad vuestro árbol, vuestra montaña 

Aquella que primero subiérais

Aquel que te acuna

en su abrazo de hojas

Allí es donde ganas facetas

Ahí es donde estás tú 

 Entero

                     

 donde te mece 

                   La cAlma

        Naces 

               Sin nacimiento